A tan sólo unos minutos de comenzar la fiesta del Parral, o del Curpillos como oficialmente se la conoce, mucho nos tememos que la escasez de papeleras en el parque y el lleno de los autobuses urbanos estarán garantizados.
Ni el mal tiempo ni la amenaza de suspensión van a privar a los burgaleses de la que, para muchos, es la festividad más popular de cuantas se celebran en nuestra ciudad. Además, el Parral tiene un ambiente festivo mucho mayor que cualquier día de las fiestas de San Pedro.
Pero si hay que poner una pega a estas fiestas son las interminables colas que año tras año se forman en la Plaza de España para montarse en uno de los autobuses urbanos camino al Parral y la ingente suciedad que se genera y no se recoge por falta de papeleras en el parque. Esperemos que, al menos este año, mañana esté todo recogido y, por tanto, el Ayuntamiento pague a los servicios de limpieza lo necesario para que así sea. De esta manera, nos evitaremos los esperpentos sufridos otros años.
Por cierto, si alguien quiere conocer lo histórico de la fiesta aquí les dejamos un enlace: Curpillos .
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