Hoy, día 12 de mayo se ha celebrado la primera vuelta de la elección a Rector en la Universidad de Burgos. Tras 11 años de mandato, José María Leal se enfrenta a una elección en la que tendrá enfrente a dos catedráticos de Derecho, Emiliano González y Alfonso Murillo.
Antes de nada es bueno recordar la última elección que se celebró en nuestra universidad. Fue hace cuatro años y en aquel entonces tan sólo se presentó Leal. Además, en aquella ocasión fue el bautizo democrático de la UBU: la elección se celebró con sufragio universal. Tanto docentes, PAS y alumnos podrían expresar en las urnas su sentir a pesar de que el peso del voto del alumnado, el más numeroso, es irrisorio. De hecho, el cuerpo menos numeroso, los doctores funcionarios alcanza el 51 % del valor de los votos. Pues bien, como comentaba, hace cuatro años sólo se presentó el vallisoletano Leal y el porcentaje de participación apenas alcanzó el 1%. De ese 1%, más del 50% (0,5 % de votos sobre el censo) fueron votos en blanco. Y el 47% (si no recuerdo mal) fueron votos para la candidatura del Químico. Pocos comentarios hacen falta para saber que Leal no era muy querido en la familia universitaria.
Hoy, al menos, la comunidad de la Ubu ha tenido la opción de elegir. Ha podido elegir entre quedarse con lo mismo, con algo parecido o con un cambio más profundo. Desde nuestro punto de vista hay un tema que resulta clave: el Campus Único. Leal lo quiere llevar a cabo, Murillo tiene más calma y González se lo piensa. Pero, ¿qué significa el Campus Único?.
El Campus Único nació de la necesidad de la UBU de obtener una financiación que la Junta de Castilla y León le niega cada año. ¿Qué hacer?. ¿Protestar? ¡No!. Es mucho mejor continuar con la tradición de la ciudad y dedicarse a vender terrenos. Ahí nació SOGIUBU y el Vicerrectorado de Infraestructuras. Al final, la idea es vender unos terrenos de dudosa titularidad de la propia Universidad en Río Vena y así financiar nuevos edificios en La Milanera. Si esto sigue adelante, ¿quién habrá financiado a la Universidad de Burgos?. ¿Su responsable, la Junta de Castilla y León?. ¡No!. Serán aquellas personas burgalesas que acaben comprando los futuros pisos proyectados para ese terreno (hasta el Diario de Burgos publicó unos planos, hoy perdidos). Y, una vez más, nos habrán tomado el pelo.
Pero no es sólo la cuestión especulativa por lo que estamos en contra del Campus Único y de quienes lo defienden. La Universidad debe dar vida a la ciudad y no se nota para nada que Burgos disponga de 9000 estudiantes universitarios por sus calles. Están apartados, en las afueras cuando deberían estar llenando el centro de la ciudad. Ya lo dijo la profesora Bernal.
Un nuevo aspecto digno de ser criticado es el apoyo manifiesto del periódico más vendido en la ciudad a un candidato. Nos vuelven a engañar cada vez que nos dicen que Burgos tendrá una Facultad de Medicina. ¡Ojalá!. Pero no se corresponde con la realidad. León la pidió antes y tiene un almacén lleno de calabazas procedentes de Madrid. Sin embargo, Salamanca y Valladolid han aumentado el número de plazas para esta carrera universitaria. Por lo tanto, Leal y Diario de Burgos, en su segundo matrimonio, mienten cuando afirman que hay posibilidades de traer esa facultad a Burgos. En España, digan lo que digan, no hacen falta un mayor número de titulados en Medicina cada año. En España necesitamos que los médicos se queden aquí y no se vayan porque su sueldo apenas sobrepasa el mínimo interprofesional. Nosotros exportamos médicos mientras en el Santos Reyes de Aranda tienen a varios polacos ejerciendo.
En definitiva, mañana sabremos los resultados (o esta misma noche) y comprobaremos si hace falta una segunda vuelta o si ya tenemos Rector. En el segundo caso, que sea lo más beneficioso para la Universidad, que ya necesita un cambio.
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